La confirmación de la condena de CFK a 6 años de prisión e inhabilitación perpetua para la actividad política, de la mano de la Corte Suprema -que en la forma de plan maestro fue previamente difundido desde las usinas de poder mediático- nos interpela a ser conscientes de la gravedad del hecho y tomar cartas en el asunto, tanto como representantes gremiales de lxs trabajadorxs como de ciudadanos.

Cercenar la posibilidad de una candidatura, a través de un procedimiento judicial viciado de nulidad, no solamente erosiona el pacto democrático de la sociedad argentina, sino que explícitamente busca censurar la voluntad popular de elegir a sus representantes. Entendemos que es preciso resaltar, que es un intento de disciplinar y amordazar a quienes se propongan liderar procesos que contribuyan a cambiar las condiciones materiales y espirituales de nuestro pueblo. Entendemos también, que es una señal de alerta para quienes nos oponemos al esquema económico imperante, que se traduce en un endeudamiento internacional condicionante de nuestra soberanía e independencia como país, de una política regresiva hacia lxs jubiladxs, de una destrucción de la educación pública y el sistema científico-tecnológico, de reducción de las áreas de asistencia social del Estado, además de la entrega de recursos naturales a corporaciones internacionales, en el marco de un país con predominio de economías extractivas y primarizadas.

En nuestra labor sindical cotidiana nos proponemos como trabajadorxs avanzar en derechos, por eso luchamos por la creación de convenios colectivos y mejoras salariales. Cada lucha por cada derecho que se gana (social, cultural o económico) por parte lxs trabajadorxs y el pueblo, contribuye a que nuestra democracia se fortalezca y por ende, tenga sentido para las mayorías populares. En este marco entendemos que una democracia verdadera radica en un contexto donde la riqueza nacional, el poder y la cultura sean distribuidos y compartidos de forma equitativa.
Entendemos que, en esta coyuntura nacional, de avance de las fuerzas de derecha, no nos debemos dejar arrebatar la idea de democracia para todxs, y la lucha por su defensa pensando en una utopía emancipadora. Por lo que nos oponemos, decimos que no aceptamos el sistema de democracia restringida imperante, que entiende la libertad, como la defensa de la propiedad y considera al mercado como la forma por excelencia de asignación de recursos en la sociedad.

En este marco, lxs docentes universitarixs y pre-universitarxs debemos darnos una tarea de cambiar el sentido imperante que desvincula el proceso de proscripción y la lucha por derechos materiales. Es necesario entender que el poder, los grupos económicos concentrados -quienes capturan gran parte de la renta agropecuaria, hidrocarburífera, minera y financiera, junto a los medios de comunicación hegemónicos- corrompe, por su propia naturaleza, el sentido democrático de justicia y soberanía siempre que interprete que sus propios intereses no se protegen.

Por eso debemos sentirnos convocados en espacios de lucha por la defensa de una democracia popular y contra cualquier forma de proscripción, en unidad con los más amplios  sectores sociales, sindicales y políticos. Por un país para todxs, que promueva la inclusión socioeconómica, la educación popular del más alto nivel, la innovación y la sostenibilidad y la redistribución equitativa de la riqueza.

El miércoles 18/6 a las 11:30 hs en la Plaza central nos concentramos para luchar por la democracia y por nuestro derecho a elegir. 

También será un momento para que de manera solidaria nos unamos para ayudar a lxs que más nos necesitan.

Te invitamos a colaborar con zapatillas,  ropa de abrigo de distintas edades y fundamentalmente leche y frazadas.

Entre todxs es más fácil.

SUMATE!!!